Las caries dentales son el daño en el esmalte dental causado por bacterias que producen ácido. Estas bacterias se mezclan con la comida formando una capa pegajosa llamada placa bacteriana, que utiliza azúcar y almidón para fabricar ácidos que corroen el esmalte. Si no se cuidan los dientes adecuadamente y se consumen alimentos azucarados sin límite, se formarán caries. Los síntomas incluyen dolor de dientes, sensibilidad a los dulces y manchas blancas o marrones en los dientes. El diagnóstico se hace a través de la observación, el examen dental y muchas veces son necesarias radiografías para confirmar el diagnóstico y la severidad.
¿Qué son las caries dentales?
Las caries dentales representan el daño en el esmalte dental causado por bacterias que producen ácido. Estas bacterias se mezclan con los restos de comida y forman una capa pegajosa conocida como placa bacteriana. En su proceso metabólico, utilizan azúcar y almidón para fabricar ácidos que corroen el esmalte de los dientes.
Daño en el esmalte dental causado por bacterias
Las bacterias presentes en la placa bacteriana liberan ácidos que atacan el esmalte dental que es la capa protectora que recubre los dientes. Con el tiempo, este ácido va debilitando el esmalte y causa la aparición de caries. Si no se trata adecuadamente, las caries pueden avanzar y afectar las capas más profundas del diente, llegando incluso hasta la pulpa dental.
Formación de placa bacteriana y producción de ácidos
La placa bacteriana se forma principalmente por el acúmulo de bacterias y restos de alimentos en la superficie de los dientes. Estas bacterias se alimentan de los azúcares y almidones presentes en la dieta, produciendo ácidos como subproducto de su metabolismo. Dichos ácidos son los responsables de corroer el esmalte dental y originan las caries.
Factores de riesgo para la aparición de caries
La aparición de caries dentales puede estar influenciada por diversos factores, siendo dos de los más destacados el consumo de alimentos azucarados y almidonados, así como una mala higiene bucal.
Consumo de alimentos azucarados y almidonados
El consumo excesivo de alimentos con alto contenido de azúcar y almidón puede aumentar significativamente el riesgo de desarrollar caries. Estos alimentos incluyen dulces, galletas, pasteles, bebidas azucaradas, entre otros. Cuando estos alimentos se descomponen en la boca, las bacterias presentes en la placa bacteriana utilizan los azúcares y almidones como fuente de energía, produciendo ácidos que degradan el esmalte dental.
Es importante limitar el consumo de estos alimentos y optar por opciones más saludables, como frutas frescas, verduras y lácteos bajos en azúcar. Además, es recomendable no abusar del consumo de snacks y bebidas azucaradas entre comidas, ya que esto prolonga la exposición de los dientes al ácido.
Mala higiene bucal
La falta de una adecuada higiene bucal es otro factor de riesgo importante para la aparición de caries. Si no se realiza una correcta limpieza dental, la placa bacteriana tiende a acumularse en los dientes, proporcionando un ambiente propicio para el crecimiento de las bacterias y la producción de ácidos corrosivos.
Es fundamental establecer una rutina de higiene bucal que incluya el cepillado de los dientes al menos dos veces al día, preferiblemente después de cada comida, utilizando un cepillo de dientes suave y pasta dental con flúor. Asimismo, es recomendable complementar el cepillado con el uso del hilo dental para eliminar los restos de comida y la placa bacteriana acumulada entre los dientes y en las zonas de difícil acceso para el cepillo.
- Mantener una rutina de cepillado dental al menos dos veces al día
- Utilizar un cepillo dental de cerdas suaves y pasta dental con flúor
- Complementar el cepillado con el uso del hilo dental
- Elegir enjuagues bucales con flúor y sin alcohol
Es importante recordar que una higiene bucal deficiente no solo aumenta el riesgo de caries, sino también de otros problemas dentales como la enfermedad de las encías. Mantener una buena higiene bucal es fundamental para prevenir la aparición de caries y mantener una salud bucal óptima.
Síntomas y diagnóstico de las caries
El desarrollo de caries dentales puede manifestarse a través de distintos síntomas que indican la presencia de este problema dental. Entre los síntomas más comunes se encuentran:
Dolor de dientes y sensibilidad a los dulces
El dolor dental es uno de los síntomas más evidentes de las caries. Puede ser constante o manifestarse solo al masticar alimentos. Además, muchas personas experimentan sensibilidad dental al consumir alimentos o bebidas dulces. Esta sensibilidad se debe a la erosión del esmalte dental y la exposición de la dentina sensible.
Manchas blancas o marrones en la superficie del diente
Otro signo de caries son las manchas blancas o marrones que se pueden observar en la superficie del diente. Estas manchas indican la desmineralización del esmalte dental, lo cual es un primer aviso de la presencia de caries.
Observación y examen dental
El diagnóstico de las caries se realiza a través de la observación y el examen dental minucioso. El dentista examinará los dientes y buscará los signos mencionados anteriormente, así como también evaluará la presencia de grietas, fracturas o áreas de esmalte debilitado y según esos signos clínicos indicará la necesidad de radiografías.
Necesidad de radiografías
En algunos casos, puede ser necesario tomar radiografías dentales para evaluar la extensión de las caries. Estas imágenes permiten al dentista identificar las caries que no son visibles a simple vista, especialmente entre los dientes y debajo de restauraciones dentales existentes o bien identificar la extensión de una lesión de caries y por consiguiente el tratamiento adecuado.
Tratamientos para las caries
Las caries dentales requieren tratamientos adecuados para prevenir su avance y restaurar la salud bucal. A continuación, te presentamos algunas opciones de tratamientos disponibles:
Flúor y su importancia en la prevención y tratamiento
El flúor es una sustancia clave para la prevención y el tratamiento de las caries. Ayuda a fortalecer el esmalte dental, frenando el daño causado por los ácidos de las bacterias y haciéndolos más resistentes al daño provocado por los ácidos. Existen diversas formas de utilizar el flúor, como la aplicación tópica durante la limpieza dental o mediante pastas dentales y enjuagues bucales que contienen este mineral.
Restauraciones como opción para tratar el diente dañado
Las restauraciones, también conocidas como “tapaduras”, son una opción común para restaurar el esmalte dental y la dentina dañadas por las caries. Durante este procedimiento, el dentista eliminará la parte afectada del diente y rellenará la cavidad con un material dental seguro y duradero como es la Resina compuesta, un material compatible con el diente de comportamiento mecánico similar y del color del diente a tratar.
Tratamientos de conducto en casos más avanzados
En casos más avanzados de caries, donde la infección ha alcanzado la pulpa dental, puede ser necesario realizar un tratamiento de conducto. Este procedimiento consiste en eliminar la pulpa dañada completamente, limpiar el conducto radicular y sellarlo. Posteriormente, se coloca una corona o incrustación permanente sobre el diente para asegurar su fuerza y función adecuada.
Extracción dental en situaciones extremas
En situaciones extremas, cuando la caries ha afectado gravemente el diente y no se puede salvar, puede ser necesario extraer el diente. Este procedimiento se realiza bajo anestesia local para minimizar las molestias del paciente. Después de la extracción, es posible que se requiera un implante dental o una prótesis para restaurar la apariencia y función del diente perdido.
Prevención de las caries
Para evitar la aparición de caries, es fundamental mantener una buena higiene bucal.
A continuación, te presentamos algunas medidas que puedes seguir:
Importancia de una buena higiene bucal
La limpieza diaria de los dientes y encías es esencial para prevenir las caries. Esto incluye cepillarse los dientes al menos dos veces al día con una pasta dental con flúor y utilizar hilo dental para eliminar los restos de comida entre los dientes.
Limitación del consumo de alimentos azucarados
Una de las principales causas de las caries es el consumo excesivo de alimentos azucarados. Para prevenirlas, es fundamental reducir la ingesta de azúcares y alimentos ricos en almidón, como caramelos, pasteles y bebidas azucaradas. Además, es importante evitar el picoteo constante y optar por alimentos saludables, como frutas y verduras, que no favorecen la formación de ácidos dañinos.
Visitas regulares al dentista
Acudir al dentista de forma periódica es esencial para prevenir y detectar a tiempo las caries. El odontólogo realizará una limpieza profesional de los dientes, eliminará la placa bacteriana y evaluará la salud oral. Además, el dentista podrá ofrecerte recomendaciones personalizadas y realizar tratamientos profesionales si es necesario.
Uso de pasta dental con flúor
Utilizar una pasta dental con flúor es fundamental para fortalecer el esmalte dental y prevenir el desarrollo de caries. El flúor ayuda a remineralizar los dientes y a protegerlos de los ácidos corrosivos. Asegúrate de aplicar una cantidad adecuada de pasta dental en el cepillo y cepilla todas las superficies de los dientes de manera suave y completa.
Otras medidas preventivas, como sellantes dentales
Además de una buena higiene y el uso de pasta dental con flúor, existen otras medidas preventivas que pueden ayudar a proteger los dientes contra las caries. Una opción es la aplicación de sellantes dentales, que consiste en una capa protectora que se aplica en las superficies de masticación de los dientes posteriores, especificamente en los surcos de los dientes. De esta manera, se evita que las bacterias y los restos de alimentos se acumulen en estas áreas propensas a la formación de caries.
Mantener una ingesta adecuada de flúor a través del agua de grifo
En Chile, el agua de grifo suele estar fluorada, lo cual contribuye a la salud bucal y previene las caries. Beber agua de grifo de manera habitual es una forma sencilla de obtener flúor adicional y fortalecer los dientes. Si tienes dudas acerca del contenido de flúor en el agua que consumes, puedes consultar con las autoridades locales de salud.
Recuerda que la prevención es fundamental para mantener una sonrisa saludable y prevenir las caries dentales. Siguiendo estas recomendaciones y manteniendo una buena relación con tu dentista, podrás evitar el deterioro de tus dientes y disfrutar de una salud oral óptima.
Cuidado de la salud bucal en personas mayores
En la tercera edad, el riesgo de padecer caries dentales aumenta considerablemente debido a diversos factores. Es fundamental que las personas mayores mantengan una buena higiene oral y adopten hábitos de cuidado especiales para preservar su salud bucal.
Riesgo aumentado de caries en la tercera edad
En esta etapa de la vida, es común que las encías se retraigan, dejando expuestas las raíces de los dientes. Esto puede aumentar la sensibilidad y favorecer la aparición de caries. Además, ciertos medicamentos y enfermedades crónicas pueden reducir la producción de saliva, lo que disminuye la capacidad de autolimpieza de la boca y contribuye a la formación de caries.
Hábitos de higiene y cuidado especiales
- Mantener una correcta higiene bucal es fundamental. Es importante cepillarse los dientes al menos dos veces al día con un cepillo suave y pasta dental con flúor. Además, se recomienda utilizar hilo dental diariamente para eliminar los restos de comida que se acumulan entre los dientes.
- Es conveniente utilizar enjuagues bucales recomendados por el dentista para ayudar a controlar la placa bacteriana y la formación de caries.
- Se debe prestar especial atención a los problemas de sequedad bucal. En caso de experimentar esta condición, se pueden utilizar productos que estimulen la producción de saliva o enjuagues bucales sin alcohol.
- Es importante evitar el consumo excesivo de alimentos y bebidas azucaradas, así como limitar la ingesta de alimentos pegajosos que puedan quedarse entre los dientes y favorecer la formación de caries.
- Si se utiliza prótesis dental removible, es necesario mantenerla limpia y en buen estado, siguiendo las indicaciones del odontólogo.
Importancia de visitar al dentista de manera periódica
Es vital que las personas mayores realicen visitas regulares al dentista, al menos cada seis meses. En estas revisiones, el odontólogo podrá detectar cualquier problema dental a tiempo y proporcionar el tratamiento necesario. Además, se recomienda realizar limpiezas profesionales para eliminar la placa bacteriana y prevenir la aparición de caries.
